Ahora se supone que hablo yo. Y vamos, que la chica me dija medio "alelao"... En realidad es que me hace correr detrás de la pelota, playa arriba, playa abajo, y me deja sin aliento. Eso sí, me hace no perder la poca forma que tengo.
Pues nada, ya me diréis qué os parece.
Un saludo o siete...
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